Alfred Hitchcock

Como podríamos hablar sobre Alfred Hitchcock sin caer en los tópicos. Se ha hablado y escrito muchísimo acerca de este gran, como llamarlo, ¿director? ¿actor? ¿productor? ¿creador? ¿innovador?... podríamos aplicarle un montón de adjetivos, calificando a una persona que realmente marcó un antes y un después y no sólo en cine.

Empezaremos diciendo que, llegó a ser "Sir" pero, nunca le concedieron un "Oscar" como director, paradojas de la vida.

Nacido en el Londres de finales del s.XIX, se nacionalizaría más tarde como americano en los años '40 del s.XX

Su andadura por el celuloide comienza desde muy temprana edad, siendo "Number 13" en 1922 (película inacabada y perdida en la actualidad) su primera incursión en largometraje.

Ya desde sus inicios demuestra una tendencia innata hacia lo enrevesado y desconocido del ser humano y su complicado cerebro.

Sería inútil enumerar las películas realizadas por él durante, lo que se considera su etapa británica pero si, hacer incapié, en algunos títulos que estamos obligados a ver los amantes del buen cine.

Títulos como: "Easy virtue" (Dudosa virtud, 1927), "Blackmail" (Chantaje/La chica de Londres, 1929), "Murder!" (¡Asesinato!, 1930), "The man who knew too much" (El hombre que sabía demasiado, 1934), "The 39 steps" (39 escalones, 1935) o "Jamaica Inn" (La posada de Jamaica, 1939) son citas obligadas, para entender la creación que posteriormente hará A. Hitchc¡ock a través de su carrera como director de cine.

Sus comienzos en EE.UU. no pudieron ser mejores. Abriendo puertas con "Rebecca" (Rebeca, 1940) una película inolvidable con referentes que, aún hoy en día, se siguen utilizando.

Nosotros queremos recomendar, no como la mejor película de este director sino, como una de sus mejores películas "Rope" (La soga, 1948). La intriga a la que nos tiene acostumbrados Hitchcock, está presente en todo el largometraje, haciendo al público partícipe de la propia trama y, confundiéndolo, hasta colocarlo en la posición del deber elegir entre unos y otros, entre lo que se considera cívico y lo que siente el ser humano.

La proeza de realizar una película donde, un trozo de cuerda sirve de "mecha para hacer estallar una bomba de relojería", lleva a A. Hitchcock a ser considerado como uno de los mejores profesionales del cine.

Sus películas, en la mayoría de los casos, no necesitan ni grandes espacios, decorados o exteriores, ni siquiera necesitan de grandes efectos especiales. Lo que hace grandes sus películas es él mismo, su forma de contar y transmitir las historias.

Lleno de intriga, revelaciones sobre la conducta humana sin la ausencia del buen sentido del humor, A. Hitchcock consiguió ganarse, no sólo el respeto de cualquiera que se dedique a ésta profesión sino, el cariño de todos aquellos que aman el cine.El día 29 de Abril, se cumplirá la tercera década de la desaparición de ésta gran persona. El mundo es peor desde que A. Hitchcock lo abandonó pero, seguro que él está mucho más tranquilo sin todos nosotros.

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